jueves, 30 de enero de 2020

VALORES (FILOSOFÍA DEL VIVIR)

        “En la medida en que las personas poseen Valores de calidad, tienen una visión superior, un impulso interior y mayor conciencia de su misión en la Vida”.
-David Angulo de Haro-


Los valores[1], desde una mirada muy personal, son aquellos lineamientos arraigados a nuestra parte sensible de nuestra Humanidad, para sentir, accionar y relacionarnos con los entes[2] con los que coexistimos (aquí para ver ejemplos). Dichos valores pueden ser inculcados desde la infancia, durante la adolescencia y/o durante el resto de la Vida de nuestra condición de Humanos; sin embargo, también pueden ser reprogramados, restructurados, reaprendidos aquellos con los que no estemos conformes, y aprendidos con aquellos valores que queremos incorporar en nuestro vivir.

Podemos decir que los valores, en conjunto con las creencias, son las bases con las que se disparan los Criterios; por ende, si queremos contar con Criterios que alimenten nuestro Vivir de manera potencial en cada decisión que tomemos, es necesario y urgente realizar una revisión a nuestros valores con los que contamos y cuales queremos hacer parte de nosotros para nuestra Existencia y Coexistencia.  Como lo expresa Bernabé Tierno: “Descubrir los valores sólo es posible a quien mira positivamente el mundo, al que previamente ha comprendido que todo lo que existe “existe por algo y para algo”; que cualquier ser, por “pequeño” que sea, tiene su sentido y su razón de ser, es decir VALE”

Tenemos que reconocer que los valores no son algo que existe físicamente, sino que se expresan a través de nosotros como seres humanos, y se manifiesta en relación con un objeto (incluyéndose al mismo ser humano).  Como lo expone Salvador Carrión: “existe una relación imprescindible sujeto-objeto para la apreciación del Valor, sin una u otra realidad el valor desaparece”[3].

Cabe indicar que los valores (aquí una lista guía), parecido a los criterios y las creencias, interfieren de cierta manera en la relación con los entes que nos relacionamos, y que de cierta manera los valores, dentro del espectro de lo humano, coinciden bajo el umbral del factor común social, bajo la mirada de una construcción grupal y colectiva. Es decir, el valor no puede ser subjetivo (en la totalidad) para que sea integrado en una sociedad, comunidad o colectivo. Por ejemplo, el valor del respeto, que compremos que tiene que ver con “la aceptación de la unicidad de la otra persona, guardando la distancia de forma armoniosa, y haciendo de intocable lo intocable, salvaguardando la integridad física, emocional, y espiritual, de sí mismo y de los entes que le rodean”; y si alguien tiene como valor de Respeto agredir a alguien, entonces no está en convergencia con los demás, y su subjetividad será rechazada por los entes con la que se relaciona.

A modo de rasgos cualitativos, los valores en sí se les atribuye que tiene que tener ciertas características para poder llamárseles como tales, estas son: Valor (que valga, es decir, ha de existir como “realidad”); Objetividad (que sea existente y objetivo); Vinculación (dependencia del objeto); Polaridad (Que tenga dos caras); Cualidad (que no se pueda medir cuantitativamente); y Jerarquía (Rango de importancia) Véase un ejemplo de ello aquí-.

Resulta interesante que si llegamos a tener dudas sobre el valor que queramos analizar, o sobre los que queramos incorporar a nuestro Vivir, podemos aprovechar las siguientes preguntas para guiarnos sobre lo que significa el valor en estudio para nosotros y cómo lo reconocemos de manera relacional con los demás. Estas preguntas son:

  •   ¿Cómo sabes cuándo eres/estás/tienes… (aquí colocarás cada una de las palabras que has escogido como valores)?
  •   ¿Qué significa (el valor) para ti? (se trata de que amplías la respuesta anterior).
  •  ¿Cómo sabes cuándo alguien te… (por ejemplo: ama, comprende, respeta, etc., valores que impliquen reciprocidad)?
  •  ¿Qué provoca que te sientas… (amado, comprendido, respetado, etc., no es aceptable otro valor)?
  •  ¿Qué detalles evidencian que para ti eso es... (el valor descrito)?
  •    ¿Cómo sabes que otra persona es/tiene/está (ejemplo: ¿Cómo sabes que la otra persona Ama?)?


A modo de brindar una mirada más generalista,  se propone una mirada ontológica, en la que se pueden asignar a los valores  como “juicios”, y por ende caen en lo que interpretamos de los que hemos hecho y qué sentimiento nos genera a raíz de una acción al quebrantar dicho valor, también lo podemos hacernos cargo de ellos al analizar a los valores como “declaraciones” con el objetivo de responsabilizarnos (responsabilidad: responder con habilidad ante una situación) de lo que acontece en determinados sucesos. En ambos casos se incita a que ampliemos la mirada del valor arraigado (evitando estancarnos en la culpabilidad ante el quebrantamiento de un valor), y nos empecemos a conocer desde la belleza de la no linealidad de la Vida, aun en los momentos de quebrantar nuestros valores, por cualquiera que sea la situación inductora.

Por último, queremos recordar que, aunque los Valores sean inyectores de comportamientos globales y socialmente aceptables (en gran parte) que permiten relacionarse de una manera adecuada y productiva, tienes que saber que debes de buscar tus propios valores, desde tu Verdad, basado en el respeto hacia ti, hacia los demás, hacia el mundo, hacia el Universo, y hacia las clases de energías manifestadas en tu realidad o imaginariamente aceptadas desde tu unicidad y legitimidad como Ser.

Gracias por acompañarnos en este camino de crecimiento, y te esperamos en nuestra próxima entrega que tratará sobre las Emociones-Sentimientos.




Bibliografía:

Apuntes de formación en Coach Ontológico desde Axon Trainnig.

Carrión López, Salvador A.: Curso de Máster en PNL. Técnicas avanzadas de programación neurolingüística, 4.a  ed., Barcelona, Ediciones Obelisco, 2010.

David, Angulo de Haro: principios y valores. Ética, Éxito y Felicidad. 

Pérez Esclarín, António: Nuevas parábolas para educar en Valores.

Tierno, Bernabé: Valores Humanos.  






[1] Existe una mirada interesante sobre los Principios, Valores y Virtudes, que expresa que: Los principios son conceptos de una Filosofía de vida no puestos en práctica; los Valores pertenece a una Filosofía de vida puesto en práctica  de manera consciente; y las virtudes son aquellos valores puesto en práctica de manera automática por formar parte de la filosofía de Vida del practicante.
[2] Toda existencia tanto material como inmaterial, tanto abstracta como concreta en tanto que es lo que se puede llegar a ser.
[3] Curso máster en PNL. Técnicas avanzadas de Programación NeuroLingüística. Pag. 432.



____________________________________________________________________



Autores del artículo:

Jean Macias Resabala & Manuel Macias Resabala

viernes, 28 de septiembre de 2018

CRITERIOS (FILOSOFÍA DEL VIVIR)

"…Más allá del papel que tocara interpretar en aquella inmensa obra de teatro, lo importante era hacer bien el papel, pero sin perder de vista que por detrás del personaje estaba el actor, el testigo silencioso de aquel drama, aquel que se vestía de ésta o aquella manera, aquel que jugaba a ser bueno o malo"  - GRIAN -    
                                 
¿Criterios…? Seguramente hemos escuchado en nuestros diálogos, conversaciones y otros medios de comunicación, ésta palabra que pasa a ser uno de los sietes pilares de la Filosofía del Vivir. ¿Pero, qué son los Criterios y porqué pasa a ser importante para nuestro Vivir?

Los Criterios lo podríamos considerar como una manifestación del ser humano, que se presenta como detonante ante ciertas situaciones, y que requiere como base de las Creencias en los niveles lógicos de ambiente, conductas y de capacidades, para su sustentación. Es decir, que los criterios podrían tener ciertos disparadores de determinados niveles lógicos según los conocimientos o capacidades relacionales que tenga el Ser para responder (mediante una acción) de manera consciente o subconsciente ante posibles situaciones presentadas. Parafraseando y aclarando lo antes descrito, decimos que cuando la respuesta de un criterio es de manera subconsciente, se opera bajo creencias de niveles lógicos de ambiente y/o de conducta; y cuándo se da una respuesta de manera consciente, se conecta con las creencias del nivel lógico de capacidades.

Es necesario tener presente que en ocasiones los Criterios podrían estar acorde a los Valores o pueden ser opuestos a ellos, por lo que se crearía situaciones, o estados, de satisfacción o insatisfacción en la persona que lo experimente.


Se dice que los criterios normalmente se expresan en forma de nombre o expresión verbal (imagen, ahorrar tiempo, comodidad, estar al día, bienestar, innovación, conocimiento,…), y uno de los modos de extraerlos de un sujeto, es haciendo una serie de preguntas relativas a las decisiones que debería tomar en una supuesta situación.

A modo de sugerencia se puede realizar una división de criterios que se quieran evaluar, restructurar y/o modificar. Esta división podría estar compuesta por los siguientes Dominios (Cuerpo, Sexualidad, Familia, Amistades, Trabajo, Economía, Amor, Espiritualidad, entre otros). Por ello, para empezar a esclarecer los criterios y relacionarnos de manera más consciente con ellos, nos auto entrevistaremos mediante estas tres preguntas relacionándola a algún dominio es específico (puedes hacer el ejercicio frente a un espejo):  

1)¿Qué cosa podrías realizar normalmente pero no la haces?

2)¿Qué beneficio inmediato obtienes al no hacerlo?

3)¿Qué tendría que ocurrir para qué te vieras incitado a hacer aquella cosa de manera inmediata?

Al rectificar y/o modificar determinados criterios, incitaremos a que se mejore el modo de responder ante las situaciones que se presenten en el desarrollo de nuestro Vivir, es decir podremos incitar a mejorar nuestras respuestas ante dichas situaciones.

Se dice que una Vida plena de recursos también es aquella que dispone de una amplia gama de Criterios. Por ello, Desarrollar y fomentar la creación de criterios claros en nuestra vida, nos contribuye a que potenciemos nuestra mente y que desarrollemos una fortaleza adecuada antes las decisiones que se nos presentan día a día a lo largo de nuestra existencia. Pues como expone Angulo de Haro: “actuamos como pensamos y somos como actuamos”

Cabe indicar que, cuando nos referimos a los criterios, conviene tener presente el tema de La supervivencia, ya que, desde aquella situación, el criterio podría alterarse presentando un cese momentáneo desplazando el criterio inicial a un “criterio crítico” (quiebre de Criterios[2]); es decir, si una persona tiene como criterio que matar a un animal es malo, y estando en un día de excursión con su familia, un animal salvaje le comienza a atacar a uno de los familiares, el criterio podría entrar en cese, y se podría llegar a matar al animal con tal de que se respecte el principio de supervivencia (o actuando bajo un criterio de mayor jerarquía).

Para culminar. ¿Qué podríamos decir que son los Criterios? Se Los podría considerar como una regla para decidir lo que es verdadero o falso, lo que se debe hacer o no hacer, lo que es bueno y lo que no lo es, etc.

Si te ha gustado el artículo, y consideras que le podría servir a otras personas, no dudes en compartirlo.

¡Nos encontramos en el siguiente artículo denominado VALORES! Y te compartimos una fracción de un párrafo de un gran libro…

“Qué la mayor parte de una sociedad o de un grupo haga determinadas cosas, o sostenga determinadas ideas, no significa que sea “lo adecuado” o “lo correcto”, ni siquiera aun cuando sea encarecidamente impulsado por las autoridades sociales, políticas o religiosas”[1]






[1] Grian. 




[2] Cese momentáneo, desplazado desde un criterio inicial a un “criterio crítico”







BIBLIOGRAFÍA:

Dilts, Robert; Hallbom, Tim; Smith, Suzi. Programación Neurolingüística. Identificación y cambio de creencias. Un camino hacia la salud y el bienestar. Urano.
Dilts Robert. El poder de la palabra. PNL. La magia del cambio de creencias a treves de la conversación, Barcelona, Urano, 2003.
Carrión López, Salvador A.: Curso de Máster en PNL. Técnicas avanzadas de programación neurolingüística, 4.a  ed., Barcelona, Ediciones Obelisco, 2010.
Alder, Harry. Programación Neurolingüística. La nueva ciencia de la excelencia personal. Edaf.
GRIAN. EL Peregrino Loco, 3.a ed., Ediciones Obelisco, 2006.
GRIAN. Más allá del arco iris, 9.a ed., Ediciones Obelisco, 1998
Angulo de Haro. Control de las emociones. http://superaprendizajealfa.com/libros/

Angulo de Haro. Programación Neuro Lingüística. http://superaprendizajealfa.com/libros/



____________________________________________________________________



Autores del artículo:

Jean Macias Resabala & Manuel Macias Resabala

viernes, 8 de junio de 2018

        AUTOESTIMA (FILOSOFÍA DEL VIVIR)


«Cuando te quieres más, el mundo te quieres más y tú quieres más al mundo»   - Lair Ribero -    
                                 
Antes de empezar a leer este artículo queremos que te realices esta pregunta: ¿Cuentas con la autoestima necesaria para realizar lo que deseas?... ¡Perfecto! Respondida aquella interrogante continuemos con el artículo…

La Autoestima la podríamos considerar como aquella valoración que uno tiene de sí mismo. Y podríamos expresar que ésta posee una difuminación, en una tonalidad con limites comprendidos desde la baja autoestima hasta la alta autoestima.

Por tanto, aquella alta autoestima es aquel nivel de independencia de estima; es decir, aquella autovaloración que tenemos de nosotros mismos, auto aceptación por nuestra unicidad, autocomplacencia de nuestras acciones, auto reconocimiento de nuestro maremágnum de capacidades singulares, auto propósitos de metas, y autoafirmación del Ser. En resumen, la alta autoestima, nos proporciona energía enriquecedora desde el interior de nuestro Ser. Y la baja autoestima… digamos… que es todo lo contrario.

Desglosado aquello que compone la autoestima, nos surge otra pregunta ¿Cómo puedo reconocer nuestro nivel de autoestima? Pues, este nivel se obtiene midiendo nuestras riquezas sentimentales, mentales, físicas, espirituales… etc. Por ello, de cierta manera es muy relativo, sin embargo, en este artículo se presenta una serie de factores de gran importancia para medir nuestra autoestima, y que si usted, al revisar algunos, no lo percibe como necesario; lo puede remplazar o eliminar.

Teniendo una referencia del nivel de nuestra autoestima, procederemos a realizar acciones que potencien y optimicen la misma, para ello, es necesario realizar una labor que enriquecerá, también, otros aspectos de nuestras Vidas. Los pasos que seguir para fortalecer de una manera extraordinaria nuestra autoestima son tres:

El primero paso es la labor con la estructura P.A.N.(PADRE, ADULTO y NIÑO); a través de ella podemos realizar un recorrido por las sendas hacia nuestros recuerdos impregnados y que fueron el ímpetu por la cual se fortalecieron determinadas creencias. Al realizar este sublime recorrido de manera gradual y consistente, comenzarás a recordar actos que llevan en sí emociones y sentimientos (con tu nivel de conciencia actual) y podrás elegir si quieres seguir con aquel recuerdo como anclaje psicológico sostenido en la base de tu subconsciente, o en su defecto, modificar aquel anclaje y aprovechar la experiencia para comenzar a navegar hacía continentes de sabiduría.

El segundo paso consiste en las labores diarias que nos aportan un incremento de fuerza y estimulaciones al centro de nuestro ser. Estas labores están comprendidas con rutinas sencillas y realmente influyentes en nuestra nueva manera de percibirnos a nosotros mismos y a nuestro entorno. Algunas de las técnicas iniciales que utilizaremos son la autosugestión, visualización, la meditación y el sentimiento de gratitud.

El tercer paso está compuesto por nuestros deseos de alcanzar determinadas metas en un futuro próximo, reconociendo que somos los creadores de los caminos necesarios para llegar a cada uno de los objetivos deseados; como también reconociendo que somos los escogedores de aquellos caminos y que la entrelazamos con la Realidad; por lo que gran parte depende de nuestra actitud de plenitud. Este tercer paso está comprendido por seis ramas que son: Practica de Vivir conscientemente; Aceptación de sí mismo; asumir las responsabilidades; autoafirmación; vivir con propósitos; e Integridad personal.

Realizando la labor de incrementar la Autoestima; se desarrolla la capacidad de asumir retos en el trascurso del Vivir; Autosuficiencia; puedes, si quieres, ayudar a otros seres; tienes más posibilidades de evolucionar por tu capacidad de cambio; aumenta tú aura, por la cual los seres confían en ti; entre otras cualidades.

Éxitos en el desarrollo de tú Autoestima, y nos vemos en el siguiente artículo sobre los CRITERIOS, que es el tercer rango del espectro de la FILOSOFÍA DEL VIVIR.

HASTA PRONTO y gracias valorar esta labor y si deseas información por interno estamos presto a colaborarte en tu crecimiento.

Escríbenos!!!







BIBLIOGRAFÍA:

Eric Berne. Análisis Transaccional en Psicoterapia. Una Psiquiatría sistemática, individual y social. Editorial Psique.

Ribero, Lair. Aumente su Autoestima. Aprende a quererte más. Ediciones Urano, 1994.

Branden, Nathaniel. Los seis pilares de la Autoestima. El libro definitivo sobre la autoestima… Ediciones Paidós Ibérica S.A., 1995

Nathali Branden. La psicología de la Autoestima. Ediciones Paidós Ibérica S.A., 2001.

Olga Castanyer Mayer Spiess, La Asertividad, expresión de una sana autoestima.

Harrison, Eric. Aprenda a Meditar. Más de 20 ejercicios Sencillos para tener paz, salud y Claridad Mental. Editorial Amat SL., 1993.

LeShan, Lawrence. Cómo meditar. Guía para el descubrimiento de sí mismo. Editorial Kairós. Barcelona, 1986.

Deepak Chopra. Retos de meditación de 21 días. Creando Abundancia.

Chopra, Deepak. Los sietes leyes espirituales del Éxito. Guía práctica para la realización de loas sueños. 1994.  

Ruíz, Miguel. Los cuatro acuerdos. Ediciones Urano, 1998.

Angulo de Haro, Psicología general. http://superaprendizajealfa.com/libros/
Angulo de Haro. Poderes Mentales. http://superaprendizajealfa.com/libros/
Angulo de Haro, Control de las emociones. http://superaprendizajealfa.com/libros/
Angulo de Haro, Super Desarrollo Alfa. http://superaprendizajealfa.com/libros/



____________________________________________________________________



Autores del artículo:

Jean Macias Resabala & Manuel Macias Resabala

domingo, 27 de marzo de 2016

LAS CREENCIAS   (FILOSOFÍA DEL VIVIR II)  
         
                                                                                  “Tanto si piensas que puedes como si piensas que no puedes, estás en lo cierto”    
                             ¾Henry Ford¾ 

   
¡Yo creo que lo voy a lograr! ¡Si me alimento con «aquello», voy a tener el resultado que deseo! ¡Nadie podría negar la existencia de…! ¡Siempre me salen las cosas como quiero! ¡Tú deberías de comportarte…! Te suenan comunes estás expresiones lingüísticas, pues en cada una de ellas, están vinculadas, de alguna manera, lo que se conoce como CREENCIAS.

Pero ¿Qué es una creencia?

Una creencia es una afirmación personal que consideramos verdadera. Es decir, son generalizaciones subjetivas que se forman a partir de las experiencias.

Para parafrasear lo anteriormente dicho, decimos que: «Las creencias se constituyen a partir de un hecho, ya sean vivencias, informaciones, insistencias, rutinas, etc.; lo que emana de ese hecho es una experiencia subjetiva registrada en el sujeto (...) De ahí surge una generalización, en unos casos desde el primer impacto, y en otras tras varias repeticiones, y esa puede quedar clasificada como positiva para el individuo o negativa, dando lugares a las creencias potenciadoras y a las creencias limitantes (…)»[1]

Estas creencias sean potenciadoras, o limitantes, «(…) orientan lo que va a pasar (o suceder) y son el filtro condicionante para que eso ocurra así»[2], Y más aún cuando creemos en algo porque lo experimentamos en nosotros, (o vemos reflejada aquella visión subjetiva de aquellas experiencias en otros objetos), procedemos a realizar de alguna manera acciones de proselitismo (en algunas ocasiones directas y muchas otras indirectamente). Y como nos dice Steven Hasan: «nada afirma tan rápidamente las creencias como intentar convencer a otros para que las acepten. Buscar nuevos adeptos cristaliza la identidad construida»[3]

Sin embargo, regresando a lo que son las creencias potenciadoras y limitantes ¿Qué se consideran estas? Las creencias potenciadoras son nuestra energía interna impulsadora que nos permite autorealizarnos y poder llevar a buen término lo que deseamos, por ende incrementa nuestra felicidad, basado que aquellos deseos, y realización de los mismos, tiene como base fundamental el respeto a uno mismo y a los demás; por otra, parte las creencias limitantes son aquellas que frenan los deseos, impidiendo la realización de los mismos. Entonces llegado a este punto podemos preguntarnos:

 ¿Cómo podemos conocer nuestras creencias, sean estas potenciadoras o limitantes?

Para responder a esta pregunta es importante que sepamos que todas las «(…) creencias se ven reflejadas en cientos de acciones cotidianas y habituales. Y, a su vez, debido a la interpretación que hacemos de ella, refuerzan nuestras creencias (…)[4] Es por ello, que gran parte de nuestras acciones encajan en un marco de creencias. Entonces, una de las maneras de identificar nuestras creencias (sean de relación causal,  relación de equivalencia o relación sobre los límites), es mediante el autoanálisis de nuestras acciones, manifestadas habitualmente en expresiones corporales y lingüísticas. Identificadas estas ¿Es posible cambiar las creencias limitantes por creencias potenciadoras? Y también ¿Es posible potenciar, aún más, las creencias potenciadoras?

¡Sin lugar a duda! Sin embargo, en un inicio el objeto que se le quiera guiar a cambiar una creencia, o, que el objeto mismo desee cambiarla; tendrá una respuesta natural de defender lo que cree. Implementando en aquella defensa, todos los mecanismos mentales con los que cuenta para ocultar su creencia (cortina de humo, señuelo de colores, peces propios en la pecera del vecino y masa crítica). Esto, en parte, es debido a que «(…) El modo cómo el material que llevamos dentro de nuestras cabezas a menudo crea un comité de selección para todo lo que dejamos entrar en ellas»[5]. «E (…) Intentamos, la mayor parte del tiempo sin siquiera darnos cuenta, confirmar lo que ya sabemos»[6] Sin embargo, es posible modificar las  creencias, ya que se ha demostrado, que es posible si estas son remplazadas. Por ello «Un cambio de creencias sólo es factible en la medida en que el sujeto tome consciencia de que necesita otra creencia más acorde o conveniente, y entonces siendo sustituida podrá modificarse»[7]

Sin embargo, en algunas situaciones, cuando se labora en cambios de creencias algunas personas pueden mostrar ciertas limitaciones que coartan y/o frenan, en cierto sentido, el cambio o modificación de creencia limitante a potenciadora.

Otras de las manifestaciones que podrían surgir en las personas que quieran realizar un cambio de creencias limitantes a potenciadoras, son las denominadas interferencias, que son aquellas defensas subconscientes vinculadas a las creencias limitantes, que por algún motivo, la persona se siente, de cierta manera, beneficiada al poseer aquella creencia.

Tal como hemos leído en los párrafos anteriores, para realizar un cambio de creencias es necesario, por así decirlo, superar cada barrera que ubica la persona mientras se avanza hacia el cambio (sean mecanismos de ocultación de creencias, limitaciones o interferencias), superadas aquellas, se procede a realizar una proyección hacia la creencia deseada (puente hacia el futuro), considerando los recursos y capacidades con que cuenta la persona, planificando lo necesario para que se lleve a buen término.

Con lo expuesto hasta aquí, si se desea realizar  un cambio de creencias (sea a nivel de conducta, criterios, personalidad,…, identidad) o alguna creencia limitadora, es necesario tener  en cuenta los siguientes pasos:

·         Saber cómo realizar el cambio.
·         Querer el cambio de forma congruente.
·         Implantarse la creencia de que es posible realizar el cambio.
·         Perseverar y ser paciente hasta que se realice el cambio.

Para finalizar, cuando nosotros contamos con creencias adecuadas (potenciadoras) enviamos mensajes a nuestra mente y  ella da la motivación para ponernos en manifiesto en la Naturaleza y hacer de la Vida un paseo grandioso, disfrutando con armonía todo lo que podamos percibir de Ella.

Espero te haya gustado la segunda parte del artículo “La Filosofía del Vivir”, y te invitamos a ser partícipe en su tercera entrega que tratará sobre la Autoestima.

Ahora te dejamos con un cuento muy corto y didáctico que resume lo escrito sobre las creencias y cuál es el poder de aquellas creencias en nosotros. ¡Qué lo disfrutes!



           






[1] Carrión López, Salvador A.: Curso de Máster en PNL. Técnicas avanzadas de programación neurolingüística, 4.a  ed., Barcelona, Ediciones Obelisco, 2010., pág. 383.
[2] Ibíd., pág. 385.
[3] Hassan, Steven. Técnicas de control mental de las sectas y cómo combatirlas. Urano. 1995.
[4] Alder, Harry. Programación Neurolingüística. La nueva ciencia de la excelencia personal. Edaf., pág. 112.
[5] Dutton Kevin, Op. Cit., pág. 213.
[6] Ibid., pág. 213.
[7] Carrión López, Salvador A., Op. Cit., pág. 221.


BIBLIOGRAFÍA:

Carvajelino, Linda; Montaniel, Donaira;  Vargas, Natalia (2013). Aplicación de técnicas de PNL, Programación Neurolenguistica en Adolescentes para identificar y cambiar creencia. Diseño y logros de objetivos alcanzables.  (). Universidad de Zulia, Maracaibo.

Dutton Kevin. Flipnosis. El arte de la persuasión en fracción de segundos. Barcelona, RBA Libros S.A., 2011.

Carrión López, Salvador A.: Curso de Máster en PNL. Técnicas avanzadas de programación neurolingüística, 4.a  ed., Barcelona, Ediciones Obelisco, 2010.

Shantal Selva. La programación Neurolingüística aplicada a la negociación. Conocimiento al problema. Barcelona, Edición Juan Granica S. A., 1998.

Dilts, Robert. Cómo cambiar creencias con la PNL.  3ª Edición. Sirio. 1997.

Hassan, Steven. Técnicas de control mental de las sectas y cómo combatirlas. Urano. 1995.

Dilts, Robert; Hallbom, Tim; Smith, Suzi. Programación Neurolingüística. Identificación y cambio de creencias. Un camino hacia la salud y el bienestar. Urano.

Alder, Harry. Programación Neurolingüística. La nueva ciencia de la excelencia personal. Edaf.








____________________________________________________________________


Autores del artículo:

Jean Macias Resabala & Manuel Macias Resabala

sábado, 31 de octubre de 2015

FILOSOFÍA DEL VIVIR

Te levantas una mañana y de repente te das cuenta que quieres algo más, que necesitas insertar en tu Vida sentimientos por cosas que realmente te apasionen. Entonces te comienzas a preguntar ¿Me siento a gusto con el trabajo/labor que realizo? ¿Me siento conforme en el entorno en que me encuentro? ¿Mis relaciones interpersonales me aportan a que evolucione? ¿Sé cuál es mi misión en mi Vida? ¿Cuál es mi visión para mi segmento de Vida? ¿Y mis objetivos propios? ¿Cómo pondré a funcionar una Filosofía del Vivir que me aporte a evolucionar mi consciencia e inmiscuirme al goce de las enseñanzas sabias que aporta la Naturaleza?... Pues empecemos.

¿Hemos escuchado alguna vez la frase Filosofía del Vivir? Si es  afirmativa tu respuesta ¿Qué tienes definido por ello? Si no es así, nos inmiscuiremos gradualmente; para, en la medida de lo posible, incentivarte y colaborarte, para que logres esclarecerlo.

Primero realizamos una pregunta más ¿Para qué me sirve definir estás palabras? Pues es vital  reconocer que «(…) la definición de las palabras más importantes de la Vida, si está determinada por la mentalidad común, asegura una esclavitud total, una alienación total»[1]  Por ello, considero fundamental que definamos algunas palabras, por «nosotros mismos», en función de determinadas guías que nos acompañan en nuestro Vivir, entre ellos podrían estar: Personas que admiramos , libros que atesoramos, seres que nos sorprenden con sus actos, experiencias personales,… y con aquel «popurrí» responder a nuestras preguntas que satisfagan nuestro deseo a la obtención de un mayor nivel de consciencia.

Sin embargo, antes de adentrarnos en el Leitmotiv del asunto, quiero anticiparme con algo y decir que es un tema que sin dudar, nos hará entrelazar nuestros conocimientos para orientarlos hacia propósitos individuales de acuerdo a nuestro nivel de conciencia. Ahora sí…

Según el diccionario de la real academia española define Filosofía como «Conjunto de saberes que busca establecer, de manera racional, los principios más generales que organizan y orientan el conocimiento de la realidad, así como el sentido del obrar humano»[2] Y Vivir… Considero adecuado que cada uno caracterice, exponga, suscite, estructure, aclare o recuerde lo que Ello equivale.

                Para entender de una mejor manera aquella orientación en el conocimiento de nuestra Realidad y aquel sentido del obrar Humano,  vamos a realizar una división en la que se podría estructurar una Filosofía del Vivir, esta es: Creencias, Autoestima, Criterios, Sentimientos, Valores, Estrategias y Decisiones.


Pero ¿Cómo podemos adquirir, adentrarnos, sumergirnos, explorar,.. cada uno de los factores antes mencionados? Para realizar aquella labor es como requisito base (lo mencionamos nuevamente): poseer una fuente de información donde podamos adquirir conocimientos; adentrarse en  experiencias enriquecedoras; sumergirnos en ser partícipes, en la medida de lo posible, de la sabiduría de algunos Seres que por causalidad están presentes en nuestras Vidas; y explorar nuestra Naturaleza buscando evolucionar. Claro, todo ello, es bueno que se realice, goce, viva,… siendo consecuentes, en función de nuestros filtros intelectuales, sentimentales,… Espirituales.

Entonces se puede decir que poseer una Filosofía del Vivir es la coordinación, experimentación y disfrute armónico del Yo en evolución, utilizando adecuadamente las Creencias, Autoestima, Criterios, Sentimientos, Valores y Estrategias manifestándose armonía entre el sentir, decir, querer y hacer de nuestras decisiones.

Ciertamente ¾por decirlo de una manera¾; ser el diseñador, constructor y fiscalizador de nuestra Filosofía del Vivir, es una labor que nos conlleva a elevar nuestro grado de consciencia, y que en cierta manera influye en la «estructuración» de nuestra personalidad.

Entonces ¿Qué es para ti una Filosofía del Vivir?

Tal vez hay muchas preguntas, pero con prontas respuestas que tú mismo irás solventando, a medida que  te vas aventurando en la «titánica» experiencia que es vivir. Espero te haya gustado la primera parte de este artículo. En las siguientes partes, estaremos describiendo cada uno de los factores que componen una Filosofía del Vivir con ciertas orientaciones para que tú La desarrolles o fomentes La que tienes.

Y te dejamos con una frase:

«Las personas tienen todos los recursos necesarios para realizar cambios deseados (dentro de sus posibilidades físicas, su grado de conocimiento, y modelo del mundo de que dispongan)». [3]

¡Un fuerte abrazo! ¡Te esperamos!



[1] Giussani, Luigi.: El sentido religioso, 2.a  ed., Lima, Ediciones Encuentro, 2008, p. 126
[2] Diccionario de la lengua Española. 2011. Vigésima primera Edición.
[3]   Carrión López, Salvador A.: Curso de Máster en PNL. Técnicas avanzadas de programación neurolingüística, 4.a  ed., Barcelona, Ediciones Obelisco, 2010, p. 468.




Bibliografía:




____________________________________________________________________


Autores del artículo:

Jean Macias Resabala & Manuel Macias Resabala